martes, 31 de agosto de 2010

necesito volver..

necesito regresar al santuario. a las charlas de intimidad en extrañeza. a los sillones enfrentados y el atardecer sonando a mi izquierda. las anotaciones, los lapsus y los análisis. la transferencia, los sueños y los silencios. la inquietud, la comodidad y los viajes. la calidez, la lejanía y la cercanía. la negación de la lógica del tercero excluido, la asociación libre y el corte.

dejame ser egocéntrico o, mejor dicho, narcisista. preocupado por los dos. maldita cadena de significantes. quiero mi espacio privado para mí, el alejamiento del mundo para entrañarme en eso que, creo, algunos llaman lo Real. Dios, devuélveme mi diván!

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